Persona-Jes!

Guiolista present… A los más Pirad@s que Ins que osarán firmar también los post de este surrealista blog –¿surrealista? si Buñuel levantara la cabeza…-.

Es jodida la convivencia con tantos persona-jes en la cabeza pero… ajustarse a la piel de otro es un indescriptible placer que ya practicábamos muchos, y mucho antes de que el record de taquilla se tiñera de azul J. Cameron.

 

FILO, LA LENGUA SAMURAI: De vuelta de todo, este Filo-sofo del lado ácido de la vida es crítico por obligación y saxofonista de vocación. Eso sí, las buenas críticas le aburren sobremanera. Vamos, que juntan a House y Al Swarenger –Deadwood-, y ni se acercan. Dice lo que nadie se atreve a decir pero todos piensan. Y es que, ya lo dijo Jardiel, Poncela: La sinceridad es el pasaporte a la mala educación. Y éste lleva sellada hasta las tapas. Su máxima aspiración es ser el mejor saxo de Kansas –aunque sea de Salamanca-, en honor a Charlie Parker. Se sabe injusto, y le encanta. Cuestiona hasta a la madre que le parió y moriría por amor, si le demuestran que esa cosa exista.

 

CANDE, PUTA BUSCA CUENTO: Marcada por Pretty Woman, Cande-la es la típica, con todos mis respetos, puta esquinera que espera que Richard Gere la rescate un día cualquier. Tiene tantas tablas que si Freud viviera, le convalidaría la carrera de psicología, entera. Y tal conciencia social, que el 90% de las veces ejerce por pena. Amante de causas perdidas, le fascina hacer de celestina -tras de un par de lecciones de vida, sexual-. Hace más obras de caridad que la Iglesia -porque, por suerte, en lo suyo de la crisis ni se enteran- y es monárquica hasta la médula –“por lo de los príncipes azules”, dice ella-. Tiene un consultorio sentimental: “Loveforwar”, así lo escribe ella (para consultas: loveforwar@gmail.com).

 

INVI, HÉROE ANÓNIMO: Invi-sible hasta para la carpa de su pecera, este voyeur con ventana, indiscreta, se fija en cada ínfimo detalle de la existencia. Agazapado tras su gabardina, recoge las hazañas anónimas de la gente corriente, ésa que pasa desapercibida. Vive de una herencia, así que le sobra tiempo para ver pasar la vida, calle abajo, calle arriba. Sin su café matutino, no es persona, y no sale a la calle sin hilo dental en el bolsillo: “Nunca se sabe, lo mismo hay que dar un beso o inmovilizar a un ratero”. Le encanta leer el periódico en el bar, y entre cotilleos y deportes, mascar soledad.  Le gustaría ser gay pero es hetero, de momento. Le repugna la hipocresía, y sería un buen Colombo, pilla antes a un mentiroso que a un cojo.

 

MATALEÓN, FIGHTER POFESIONAL: Tatuado con un dragón de la nunca al muslo, tiene mirada fiera pero corazón de niño con zapatos nuevos. Se prodiga poco, pero cuando lo hace no deja a nadie indiferente. Es más radical que los “libres”, parece inmune al dolor y al miedo. No ha terminado un libro en su visceral existencia, aunque es más listo que el hambre y huele a los cobardes a leguas. Le irritan los irrespetuosos y, fuera del ring, odia la violencia: “Hay unas reglas”. Enseña a defenderse al débil y reta desafiante a los que le juzgan sólo por su tatuaje. Su vida no ha sido fácil, es un niño de favela, que ha salido solo adelante. Lucha hasta su último aliento, aunque no se sienta las piernas.

 

YOKAI, ALMA INMORTAL: Es la fantasma del cuento, la bella ectoplasma que levita de antro en antro buscando comida, o consuelo, según tenga la noche. Murió con prisas, no le tocaba; así que aún pulula entre los insulsos mortales creyendo tener una misión -lo malo es que no sabe cuál-. Con el tiempo, ha adquirido la habilidad de pasar por humana. Incluso trabaja como médica forense, “me ponen las larvas”. Al principio, tuvo una etapa vampira, pero se hartó de estar a líquido siempre. A ella le va carne, y se pasó a lo zombie. Ahora le ha dado por el estilo japo. Y aunque su madre le puso Juana, se hace llamar Yokai y lleva la melena sobre la cara, por acojonar más al personal.

  

 

KDIK, EL REPLIKANTE: Un macizo con gafas a lo Clark Kent que se pasa el día preguntándose: “¿Por qué?” Si no fuera por su lado runner, sería el perfecto candidato a nuevo fichaje de Friends, porque es un absoluto desastre. Digno ejemplo de que lo Murphy es una Ley, salvo en el campo científico-intelectual, ahí es un puto crack. No hay enigma ni sudoku que se le resista, aunque siempre que los rellene se manche de tinta. Le fascina lo desconocido, pero no cree en nada que no se pueda demostrar: “¿E.T.? Un enano en un traje de silicona. ¿King Kong? Un simio”. Es licenciado en física, experto en cuántica y con un master en biología molecular, pero, lo que es la vida, pasa sus nanosegundos vendiendo cuadernos en una papelería, negocio familiar.  

Escoge “avatar” y doma tu “Ikrán”, pero, por favor, al estilo Buenafuente, gracias…